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Temperatura de color
El primer fenómeno: el fuego fue la primera y única fuente de iluminación por siglos de años al cual el ojo humano se evolucionó de tal manera que es más sensible a los colores rojizos y amarillentos. El segundo: mediante reacciones químicas dentro de nuestro cerebro, los colores fríos nos hacen sentir alerta, mientras que los colores cálidos dan un sentimiento de descanso y confort.
A grandes rasgos, restaurantes, hoteles, y casas utilizan colores cálidos más que cualquier otro tipo de espacio arquitectónico. Oficinas, escuelas y calles altamente transitadas utilizan colores fríos para su iluminación. Dependiendo del tipo de comercio, algunas tiendas utilizarán colores fríos, y otros colores cálidos para su iluminación. Para definir una acertada temperatura de color de iluminación siempre se debe de considerar cuál será el uso del espacio.
Sin embargo, para obtener el tono preciso se tiene que considerar el nivel de iluminación al mismo tiempo que se considera la temperatura de color. De acuerdo con el famoso estudio de la Curva de Kruitof, las combinaciones de temperatura de color con un bajo nivel de alumbramiento, son los que producen ambientes fríos y grises, mientras que los de la zona superior se cree que producen ambientes excesivamente coloridos y poco naturales.
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